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Por años la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros, ha sido saqueada por políticos corruptos como algunos alcaldes, que hacen las veces de Presidentes del Consejo de Administración de esta paramunicipal y de los gerentes generales como lo ha sido Salvador Treviño, que tiene décadas pegado a la ubre de este organismo; actualmente es el gerente técnico y gana 64 mil pesos de sueldo y una compensación mensual de 40 mil.
Salvador Treviño Garza, junto con Baltazar Hinojosa Ochoa, Alfonso Sánchez Garza, Jesús “Chuchín” de la Garza, han sido los artífices para endeudar a la Junta de Aguas y Drenaje de Matamoros, con el Banco de América del Norte (BDAN) y otros organismos que han aportado recursos a fondo perdido, como la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), la Comisión de Cooperación Ecológica Fronteriza (COCEF); el propio Gobierno Federal Mexicano, que solo sirvieron para que los políticos corruptos se enriquecieran más, porque la ciudad de “progreso” que habían prometido, hoy se encuentra sumida entre las aguas puercas, negras, entre la mierda.
Solo para que no se olvide, les quiero recordar quienes fueron los alcaldes y gerentes que han endeudado a Matamoros, con créditos ante el BDAN y que prometieron que Matamoros sería una ciudad de calidad y de progreso:
En la segunda sesión extraordinaria del Consejo de Administración de la Junta de Aguas y Drenaje, del día jueves 27 de octubre de 2005, siendo presidente municipal, con funciones de presidente de este Consejo de la JAD, valga la redundancia, Baltazar Hinojosa Ochoa y Gerente General del organismo, Jesús “Chuchín” de la Garza Díaz del Guante, solicitaron un crédito al BDAN, con el consentimiento y aprobación del Ayuntamiento de Matamoros, las condiciones del préstamo fue la participación de ingresos federales correspondientes al municipio, esa fue la garantía.
Nadie de los “consejeros” de esa fecha se opusieron, todos aprobaron por unanimidad, tal desgracia para Matamoros, claro que eso benefició muchísimo a Baltazar Hinojosa, a Chuchín, y al gobernador en turno, quienes prometían que los servicios de la JAD serían de una alta calidad, pues se estarían construyendo plantas tratadoras de aguas residuales, rehabilitando caídos y construyendo tanques elevados para una mejor presión.
Para acceder a los créditos del BDAN, Salvador Treviño, sesudamente ideó el Proyecto Matamoros y creó el Programa Integral de Agua y Saneamiento, el PIAS, sin estar en la JAD, “Chava” fue el cerebro, junto con Baltazar Hinojosa.
Uno de los gerentes del PIAS, en ese año 2005, según consta en los documentos que exhibimos como evidencia de lo que aquí damos a conocer fue Rodolfo Cazares Garza, en ese entonces Gerente del Proyecto Integral de Agua Potable y Saneamiento, a quien en el 2011 lo secuestraron y ya no se supo de él hasta la fecha.
Cazares, en esa sesión extraordinaria de Consejo de Administración, fue el expositor para convencer a los demás consejeros que le aprobaran a Baltazar y a Chuchín la autorización para endeudar a la JAD y atravesar los ingresos de las participaciones federales del municipio, el cual serviría como aval solidario ante el Banco de América del Norte.
Cazares, les dijo que hacía falta el tratamiento de las aguas residuales y que a las estaciones de bombeo les estaban dando un doble uso al combinar el desalojo de las aguas negras con las aguas pluviales, lo que en consecuencia provocaba una ineficiencia en estos servicios y que además ocasionaba que las redes se colapsaran.
El discurso de Cazares sobre la presión insuficiente y que las Plantas Potabilizadoras no producían la cantidad de litros requerida por el incremento de la población y que la JAD no contaba con un sistema de presión para regular la distribución del agua, terminó por convencer a los consejeros de la paramunicipal, quienes le autorizaron a Baltazar y a Chuchín solicitaran el crédito por $110,000,000.00 (ciento diez millones de pesos), equivalentes en ese tiempo a $10,000,000.00 (diez millones de dólares).
La primera fase del PIAS inició en julio de 2003 y concluyó en el 2006 durante el gobierno de Baltazar Hinojosa Ochoa; comprendió supuestas obras de agua potable, alcantarillado y saneamiento, con una “inversión” de 76.6 millones de dólares; en esa fecha, el dinero en la JAD, eran ríos de agua viva, pura felicidad.
Se supone que se invirtieron 35.4 MDD para servicios de agua potable y 41.2 MDD para drenaje sanitario y saneamiento; el origen de estos recursos fueron que 33 MDD provenían del Gobierno Federal Mexicano a fondo no reembolsable, eso a los que ellos llamaron a FONDO PERDIDO y sí que se perdieron, porque Matamoros está que da vergüenza ajena.
Y 33 MDD más, del gobierno de los Estados Unidos, a través de fondos del Fondo de infraestructura Ambiental Fronteriza (BEIF), un organismo cuyo propósito es hacer que los proyectos ambientales sean accesibles para todas las comunidades en la región fronteriza entre México y Estados Unidos; es por eso que no nos explicamos porque Matamoros, está en las condiciones en las que se encuentra, se suponía que sería una ciudad de calidad.
“Para que pudiéramos tener una ciudad de calidad, necesariamente deberíamos tener tres Plantas Tratadoras de Aguas Residuales (PTAR), por lo que es importantísimo iniciar la construcción de la primera planta en este mismo año, aunque solamente se licite la obra y se otorgue el anticipo para que con esto tener ya asignado los 18,000,000.00 de dólares”, les dijo Baltazar Hinojosa a los consejeros en esa sesión.
Como son las cosas, en la actualidad Matamoros tiene dos PTAR, ninguna de ellas funciona ni al 10 por ciento y Baltazar Hinojosa Ochoa, el mismo que quiso ser gobernador de Tamaulipas y que recientemente se declaró fiel seguidor de otro corrupto y ex presidiario como Eugenio Hernández Flores, que busca ser senador, tampoco vive en esta ciudad “de calidad”, él vive de aquel lado del charco, en Texas.
Después de la intervención de Baltazar en esa sesión del 27 de octubre de 2005, Jesús de la Garza, entonces gerente general de la JAD que ganaba 200 mil de puro sueldo mensual, amenazó a los consejeros que sino gestionaban una línea de crédito con el BDAN, no les iban a liberar los recursos para la construcción de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales y las obras accesorias “contamos hasta el mes de abril (2006) para gestionar la línea de crédito”, esa fue la amenaza de Chuchín, quien ya se afilaba el colmillo.
Chuchín y Baltazar Hinojosa previamente le habían instruido a Marco Cuellar Garza, gerente administrativo que les diera una buena maquillada a los estados financieros, para que la JAD apareciera contablemente con buenos números y poder acceder a la línea de crédito del BDAN, la paramunicipal apareció ante la Financiera con el suficiente remanente para pagar la deuda, pero al paso de los años se ha descubierto que todo fue una trampa, la JAD nunca tuvo la capacidad para pagar, porque mucho de esos recursos se desviaron e incluso las obras de la supuesta infraestructura se hicieron de muy mala calidad, para ejemplo, está la propia construcción de las PTAR.
Baltazar les lavó el coco o les untó la mano a los consejeros, algunos de ellos recibieron beneficios como meter a esposas, hijos o parientes a la nómina de la paramunicipal, práctica que hasta la fecha perdura; les dijo que la JAD aumentaría su producción y eficiencia en la prestación de los servicios, endeudó a Matamoros en una deuda que todavía no se paga y a sabiendas de que la Junta de Aguas y Drenaje no pagaría, Hinojosa Ochoa convirtió al municipio en el aval solidario de este organismo, por eso en la actualidad al Ayuntamiento de Matamoros le descuentan a chaleco 3 millones de pesos mensuales de las participaciones federales por dos créditos que la JAD tiene con el BDAN.
La primera deuda fue la de Baltazar y el segundo crédito con el BDAN fue el que solicitó Alfonso Sánchez Garza, alcalde y presidente del Consejo de Administración de la JAD, según consta en el acta de la sesión ordinaria del viernes 8 de junio de 2012, donde en el punto 6 del orden del día, Poncho y su entonces Gerente General de la Junta de Aguas, Salvador Treviño Garza, sometieron a autorización contratar un crédito con la Corporación Financiera América del Norte, S. A. de C. V. “BDAN”, según ellos para el financiamiento parcial de las obras del proyecto del Programa Integral de Agua y Saneamiento (PIAS), la compra de equipo y otros conceptos relacionados.
Salvador Treviño fue el encargado de la terapia a los consejeros, que ya bien maiceados no se opusieron a volver a endeudar a Matamoros; Chava inició con el rollo de siempre:
“El objetivo es continuar con el PIAS que inició en 1996, en donde se empezó a trabajar con el Proyecto Matamoros, en el año 2002 se hizo la radiografía en cuanto a la problemática que se tenía, obviamente teníamos presión insuficiente en varias zonas de la ciudad, falta de abastecimiento de agua, fugas…bla, bla, bla…lo cual nos llevó a generar el PIAS en donde generamos un horizonte de 20 años, donde se llegó a la conclusión de que Matamoros requería de 428 millones de dólares”.
Eso fue lo que pedía Salvador en el 2012, para “rescatar” a Matamoros, hoy en la actualidad como Gerente Técnico de la JAD, porque sigue pegado a la ubre, asegura que para resolver la problemática de caídos, rehabilitar las potabilizadoras y las PTAR, esta paramunicipal requiere de 4 mil millones de pesos o más; recientemente traía otro negocio, perdón, “proyecto”, el del Hidrogeno Verde, pero el Congreso del Estado no se lo aprobó.
Los consejeros del año 2012, terminaron por aprobar la autorización del segundo crédito por 165 Millones de Pesos, que la JAD pagaría “sobradamente” en 240 meses, 20 años de endeudamiento, pagos fijos mensuales, a una tasa fija del 10.02 por ciento y otra vez, la garantía fueron los ingresos federales del municipio de Matamoros.
Se suponía que ese dinero, esa línea de crédito con el BDAN, se utilizaría para la segunda fase del PIAS, que consistía en la construcción de estaciones de bombeo, rebombeo, 10 kilómetros de interceptor de 24 pulgadas a 60¨, la construcción de la PTAR zona oeste y que cree usted querido y caro usuario matamorense de la JAD, todo fue un cuento, las obras se hicieron de mala calidad.
Esta es la raíz del problema, por eso la JAD está endeudada, llena de corrupción, la han saqueado y no parar de hacerlo, si el pueblo no se organiza para rescatarla, muy pronto Matamoros va tener problemas muy severos y aquellos que la saquearon, la van a querer privatizar para seguir enriqueciéndose.
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