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Pablo Meléndez
Por: @jpms1500
Durante los últimos años, el PAN nos ha revelado su rostro misógino, elitista y racista, siempre en contra de los más desfavorecidos que han tenido que sufrir la miseria para que la clase privilegiada pueda vivir con las mayores comodidades de las que alguien pueda gozar.
Esta clase parasitaria que se alimentaba del erario público: evadiendo impuestos, obteniendo beneficios públicos con amiguismos y compadrazgos, evadiendo la responsabilidad de salarios justos a sus empleados y principalmente robando por medio de contratos y licitaciones públicas.
Es por ello que desde el primer día que Obrador tomó el poder y promovió un Estado que distribuyera la riqueza con más equidad, ellos saltaron y comenzaron una guerra contra todos esos “nacos”, “resentidos”, “chairos” y “piojosos” (como ellos nos llaman), que apoyan a López.
Entre los candidatos de la oposición, son diversos los comentarios de lo que sucederá con las obras de la actual administración: Lili Tellez dice que si gana la presidencia “echaría abajo distintos proyectos de la 4T”.
Por su parte, el prófugo Ricardo Anaya asegura que: “El gobierno de López Obrador está gastando en una bola de locuras, como por ejemplo una absurda refinería que nunca va a lograr recuperar lo que costó porque es una pésima idea. Y claro, entre más te endeudas, pues menos te quieren prestar”.
¿Pero qué significa desaparecer estos proyectos y obras de un plumazo como desean los panistas? Pues nada menos que la desaparición de más de 281 mil empleos directos que se están creando a partir de la construcción y finalización de cada proyecto, así como más de un millón de empleos indirectos.
El Tren Maya, un proyecto de transporte que recorrerá varios estados del sureste mexicano, ha generado 105 mil empleos en abril del 2022, una cifra que aumentó a 114 mil para julio de ese mismo año (Según datos del gobierno mexicano). Además, se espera que en los próximos 10 años, el Tren Maya genere 1.5 millones de empleos, lo que sin duda tendrá un impacto significativo en la economía de la región.
El AIFA también ha generado una importante cantidad de empleos. Según datos del gobierno, hasta el momento se han generado 153 mil 275 empleos directos y 253 mil indirectos gracias a la construcción de esta obra.
La refinería de Dos Bocas, por su parte, ha generado 23 mil empleos directos y 100 mil indirectos. Este proyecto, que se encuentra en construcción en el estado de Tabasco, tiene como objetivo reducir la dependencia de México de las importaciones de combustibles.
Además de estos proyectos, es importante tener en cuenta el contexto del empleo en México en los últimos años. Durante el gobierno de Felipe Calderón, el desempleo alcanzó su máximo en el año 2011 con una tasa del 5,3%, mientras que al inicio de su mandato se encontró en un 3,2%. Durante el mandato de Enrique Peña Nieto, la tasa de desempleo se redujo desde el 4.9% con el que recibió el cargo en 2012, hasta el 3.4% en 2017.
En el mandato actual, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador, la tasa de desempleo alcanzó su máximo en el 2020 con el 4.5%, pero se redujo en el 2022 al 3.1%, una cifra que nadie había alcanzado anteriormente sin utilizar prácticas de outsourcing.
Además, en enero del 2023 se alcanzó otro mínimo histórico con el 2.8%, lo que indica una tendencia positiva en la generación de empleos en el país.
Pero hay que recordar la importancia de la estela de luz de Calderón que costó más de mil millones de pesos y que creó la impresionante cifra de tres empleos, el que la cuida, el que la limpia y el que se llevó todo ese dinero a un paraíso fiscal.
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