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Los gobiernos panistas y priistas de Fox, Calderón y Peña solo aprovecharon cada tragedia para desviar millones con el Fonden.
Durante los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) se convirtió en un foco de corrupción y desvío de recursos públicos, con pérdidas de al menos 500 millones de pesos en cada declaratoria de desastre, reveló la secretaria de Anticorrupción y Buen Gobierno, Raquel Buenrostro.
La funcionaria federal explicó que los mecanismos de acreditación de gasto en ese fideicomiso carecían de transparencia, lo que permitió el desvío sistemático de recursos bajo el argumento de atender emergencias naturales.
Huracán 2013
La corrupción del Fonden con Fox, Calderón y Peña
Buenrostro destacó que en el año electoral de 2018 el Fonden incrementó su presupuesto de manera atípica, alcanzando los 59 mil millones de pesos, “un exceso fuera de todo rango histórico”, mientras se emitían declaratorias extraordinarias, como las relacionadas con olas de calor, sin evidencia clara de daños en infraestructura. 
“Cada evento tenía faltantes de al menos 500 millones de pesos”, aseguró durante su exposición en Palacio Nacional.
En el sexenio de Vicente Fox, la Coordinadora Nacional de Protección Civil, Carmen Segura Rangel, fue señalada por múltiples actos de corrupción, lo que derivó en su renuncia e inhabilitación por 10 años tras detectarse irregularidades por 182 millones de pesos, según la Auditoría Superior de la Federación (ASF). La Secretaría de la Función Pública también documentó encubrimientos internos que impidieron sanciones más amplias.
¿Qué era el Fonden?
Durante la administración de Felipe Calderón, los desvíos alcanzaron gobiernos estatales. En 2007, el entonces gobernador de Tabasco, Andrés Granier, recibió recursos del Fonden para atender inundaciones que afectaron al 70 por ciento del estado; sin embargo, destinó 215 millones de pesos a cubrir déficit fiscales y otros gastos ajenos a la emergencia, incluyendo telefonía y consultorías. En 2011, el gobernador Javier Duarte de Veracruz paralizó la atención a inundaciones hasta recibir el dinero del Fonden, del cual devolvió sin ejercer 537 millones y no comprobó el uso del resto.
Con Enrique Peña Nieto, las irregularidades se repitieron. Tras los huracanes Ingrid y Manuel, la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) sobreejerció 445 millones de pesos pese a que solo se le habían autorizado 120. Además, con el Plan Nuevo Guerrero se destinaron 40 mil millones (12 mil del Fonden) para la reubicación de familias, pero 30 de los 43 fraccionamientos construidos quedaron inhabitables por fallas estructurales.
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Ineficiencia, burocracia y cambios para atender desastres
La secretaria Buenrostro calificó el funcionamiento del Fonden durante esos años como “patético y burocrático”. En los huracanes Ingrid y Manuel, el gobierno instaló 29 comités de daños y emitió igual número de declaratorias para atender 361 municipios, pero tardó 119 días en iniciar las obras de reconstrucción.
En contraste, comparó la respuesta del actual gobierno de Claudia Sheinbaum, donde la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes rehabilitó la red federal en apenas tres días tras las recientes inundaciones.
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Durante los sismos de 2017, se emitieron 18 declaratorias (11 de desastre y 7 de emergencia) con un gasto de 19 mil millones de pesos, pero Sedatu solo revisó el 35 % de las 168 mil viviendas afectadas. Se documentaron pagos irregulares por 90 millones y el uso indebido de recursos del Fonden en lugar de seguros institucionales.
La ASF concluyó en 2017 que el Fonden era “ineficaz, ineficiente, costoso, reactivo y opaco”. Los recursos, indicó Buenrostro, se concentraban en obras y servicios públicos, dejando sin atención directa a la población damnificada. En contraste, señaló que en la administración de López Obrador la atención se volvió directa y ágil: en el huracán Otis se auxiliaron más de 300 mil personas, en el John 140 mil y en el Erick cerca de 60 mil, logrando mayor cobertura con menos recursos.
 

 
 
 
 
 
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